En el inicio de este periodo presidencial. Que en pocas horas asume su mandato. Y en el que se tomó como banderas el cambio en el Pais, se da inicio a un nuevo periodo político y social, lleno de expectativas e ilusiones para todos los colombianos.
De él comienzan a aparecer un sin número de propuestas de ley para el periodo legislativo. Y tal vez una de las propuestas más polémicas fue la anunciada en cabeza de la nueva ministra de salud y protección social la Dra. Diana Carolina Corcho Mejía, una profesional especialista en el área de psiquiatría, docente universitaria y con un largo recorrido administrativo. Una dura crítica del sistema de salud. La Dra. Carolina, mencionó desde su designación que se deben acabar con las Empresas promotoras de salud (EPS). Propuesta que inmediatamente causo revuelo, y trajo con si pronunciamientos a favor y en contra de la propuesta. Estas son el ojo de esta tormenta que vivimos en el sector, nos preguntamos: ¿son las únicas responsables? ¿Qué otros actores participan en el proceso de una buena atención? ¿Si se acaban las EPS se mejora el servicio? No se trata de un artículo para condenar a las EPS ni mucho menos para defenderlas es un escrito para tener una visión integral y pedir mesura y a la vez celeridad en los cambios urgentes que necesitamos.
Si encuestamos a los Colombianos mas del 80 % de ellos presentan quejas, reclamos e inconformismos con el actual sistema de salud, muchos de ellos no logran comprender porque una cita medica debe ser programada para 90 días y si se tiene suerte para 60 días después de ser solicitada, de igual forma porque se deben generar estudios complementarios y citas de medicina especializadas en lugares distantes a su sitio de vivienda; es así como un ciudadano debe desplazarse horas y kilómetros para poder recibir los servicios.
No comprendemos por qué a pesar de cancelar cuotas mensuales, se debe cobrar cuotas de pago proporcional conocidas como cuotas moderadoras. En fin, la comunidad en general ha venido sumando dentro de sus percepciones y alimentada por la inmediatez de las noticias que a diario recibimos a través de los medios tecnológicos de quejas reclamos, videos y en fin una serie de testimonios. Que generan cada día sentimientos de disconfort, desagrado y odio hacia el sistema de salud.
Es tanto que ir al médico hoy se ha convertido en un escenario poco agradable por no decir que, en todo un calvario, si así de fuerte. Creo que hoy odiamos asistir a nuestra cita. No nos sentimos a gusto, y a esto de suma, el trato recibido en los servicios de urgencias y consulta externa. Frases tales como “el medico no me tocó, no me miro la cara estaba solo dándole al computador, me dijo que solo me podía atender una cosa “son las principales quejas que emanan de esta atención. Por eso se percibe que es casi que ganarnos una lotería. El baloto o la 9 millonaria, cuando nuestro proceso asistencial fluye de manera rápida sin ningún tipo de contratiempo.
Bajo estos escenarios analicemos un poco todos los actores del sistema de salud y cuáles pueden ser las posibles soluciones.
Los profesionales de la salud
Después de invertir muchos años y mucho dinero en su preparación académica, los profesionales de la salud en las diferentes ramas, hablo del médico general, el médico especialista, el odontólogo, el especialista, el psicólogo, el fisioterapeuta, el bacteriólogo, las auxiliares de enfermerías, los operadores de vehículos de emergencia. Se ven enfrentado en este sistema a una inestabilidad laboral, donde las cooperativas, y asociaciones son quienes le dan manejo a sus honorarios y a sus horas laborales. Cuantas veces hemos escuchado que a los profesionales se les adeudan meses de salarios, cuantas veces hemos escuchado de renuncias masivas por falta de pago. Lo primero que necesitamos estabilizar es el futuro económico de los profesionales con el fin que puedan ellos y sus familias vivan dignamente y no esperemos una nueva pandemia para salir a reconocerlos como héroes.
Se deben individualizar las jornadas laborales para una mejor atención en salud, no resulta igual un medico o una enfermera de las unidades de cuidados intensivos, las urgencias, área quirúrgica que aquel de los servicios ambulatorios. Sus horarios deben diferenciarse.
La exigencia para los profesionales:
Necesitamos fortalecer con los niveles formativos de todos los profesionales, es una queja que no puede pasar por alto y es la capacidad y el conocimiento de los profesionales de la salud. Los médicos deben tener más poder resolutivo frente a situaciones del diario en nuestras urgencias Que tan bien preparados están nuestros médicos y enfermeras. Cual ha sido su formación académica institucional y cuáles fueron sus escenarios y horas de practica. Emerge aquí la figura del campus universitario y su compromiso con esa formación. Por eso dentro de este cambio se incluye el sistema educativo también. Esto nos debe sacar de un paradigma el de “médicos malos y médicos buenos“.
Ir al médico hoy se ha convertido en un escenario poco agradable por no decir que, es todo un calvario. ¡Sí así de fuerte! Creo que hoy odiamos asistir a nuestra cita. No nos sentimos a gusto, y a esto se suma, el trato recibido en los servicios de urgencias y consulta externa.
Todos nuestros médicos deben tenerla la formación y orientación que les conceda el poder resolutivo de las situaciones que se le pueda presentar en diferentes escenarios. Con esto no quiero decir que los casos clínicos de pacientes complejos no ameriten remisiones a niveles superiores de atención y toda la complejidad que en ellos existe, me estoy refiriendo a tratar de disminuir los pacientes que solicitan estos niveles superiores de atención cuando pudieron ser resueltos en niveles inferiores de complejidad. Y esto es causa de represamiento de citas, no disponibilidad de camas hospitalarias, hacinamiento y en fin todo lo que se vive y cada de uno de nosotros conoce en los hospitales de alta complejidad.
Los centros asistenciales hospitales y clínicas (IPS)
El modelo de salud que se ha planteado en las ultimas 4 décadas, fue un modelo que llevo al deterioro de la red hospitalaria publica y es así como fueron desapareciendo años tras año hospitales públicos por no contar con la suficiencia patrimonial, no estar a la vanguardia d ellos cambios, no contar con la tecnología de punta y además de esto de ser pesimamente administrados. Que se quiere en los cambios para futuro que se fortalezcan las redes hospitalarias tras alianzas publicas y privadas esta una figura que no comparto pero que ha demostrado en un momento determinado algunos frutos y por eso se ve como una opción imparable a nuestro futuro inmediato.
Se quiere que sea cada vez más cerca la atención en ciertas complejidades, el ejemplo más claro está en las islas de san Andrés y Providencia donde deben ser remitidos pacientes en vuelos ambulancias porque el poder resolutivo de la red hospitalaria es insuficiente. Cuanto cuesta ese traslado cuanto le representa al sistema, cuanto le representa a las familias el desplazamiento, y no hablo de un día o una semana hablo de meses para concluir con la atención.
Nuestros centros asistenciales deben tener una distribución homogénea en el pais, deben estar en sitios geográficos estratégicos que les permitan a los pacientes No sentirse como extraditados de sus territorios
Nuestros dirigentes
En este grupo se incluyen no solo nuestros gobernantes elegidos por elección popular, también se incluyen los administradores y gerentes de los centros asistenciales, hasta cuando vamos a seguir viendo el sector salud como una oportunidad para llenar nuestras arcas, a costa de fraudes, desfalcos, engaños, triquiñuelas al sector. No mas carteles del SOAT, no mas carteles de la hemofilia, No más malos administradores. Cada uno de los dirigentes deben convertirse en un celoso guardián de este tesoro llamado el sistema de salud, debe ser un paladín por la lucha de uno de los derechos fundamentales la salud.
Los Pacientes
Solo me queda generar preguntas al llegar a este actor del sistema
¿Ha acudido al servicio de urgencia alguna vez de manera innecesaria en búsqueda de alguna incapacidad?
¿Acude usted a los programas de prevención en salud, se realizó su mamografía, su citología vaginal, se ha hecho seguimiento de su próstata, acude usted a los controles de hipertensión arterial y diabetes mellitus?
¿Usted se toma todos los medicamentos que le son enviados en su fórmula médica?
¿Tiene usted a su hijo en los controles de crecimiento y desarrollo, le cumple y cumple el esquema de vacunación?
¿Acude a los controles de embarazo, hace suso de los programas de planificación familiar?
¿Usted fomenta estilos de vida saludable (Actividad física – dieta saludable)?
Y muy seguramente otras que uste mismo conoce como conductas no contempladas dentro de los deberes y derechos de los usuarios, si desaparecen las EPS pero no cambiamos nuestra conducta el esfuerzo será en vano
Las EPS (Empresas prestadoras de salud)
En medio del ojo del huracán pasan estas empresas que fueron creciendo de manera paulatina a medida que las nuevas leyes en salud aparecieron. Ilustrando un poco a los lectores recordemos que antes de latan mencionada ley 100 se contaba con el modelo de atención del ISS (instituto de seguro social), los regímenes especiales y la atención por la red hospitalaria publica para la población sin ningún tipo de aseguramiento. Este modelo de atención también cargaba a cuestas muchas quejas y fue dentro de otras lo que finalmente lo llevo a desparecer. Y emergen las figuras de las empresas promotoras de salud que también han sufrido cambios para su subsistencia. Algunos consideran este intermediador como el gran responsable del desastre de la mala atención del sector salud en nuestro País.
Si desaparecen lo cual no creo que sea de la noche a la mañana, a quien trasladara las obligaciones de ley en el ámbito jurídico, financiero y asistencial que hoy cumplen.
Claro que deben desaparecer aquellas EPS que tienen quejas, que en la superintendencia sabe cuales son, aquellas que han atropellados a sus usuarios, aquellas que han puesto en peligro la integridad y vida de sus usuarios, a esas No queremos saber mas de ellas ni tampoco saber que se mimetizan cambiando de nombre
De igual forma reconocer, que muy seguramente un grupo de ustedes les ha ido bien en su EPS y que gracias a su proceso organizativo han logrado recibir tratamientos de alto costo, trasplantes renales, hepáticos, de medula ósea, han recibido servicios de quimio y radioterapia que le han permitido seguir con vida. No todo lo del sistema es malo, pero si se necesitan cambios profundos en el sistema OJO sin que nos vayan a llevar a una hecatombe y que sea peor el remedio que la enfermedad. Oro para que podamos tener cambios significativos en el sector y todos gocemos de un mejor servicio de salud.
Muy acertado su análisis al sistema de Salud, claro que sí se e necesitan cambios y correcciones al mismo, como no contar con indicadores de gestión de calidad, como para generar una medición en aquellos factores transcendentales, como lo serían; _ la oportunidad del servicio, los celeridad en los procedimientos asistenciales, y la calidad de la atención en General, pero quizás el modelo como tal ,fue diseñado para mejorar el pauperimo sistema anterior , politizado e ineficiente .Y ,tal ajuste ,nuevamente deberá emprenderse en los actuales momentos , dadas las situaciones de corrupcion en qué lo han sometidos los intered mezquinos de algunos cuantos empresarios de la Salud