– “Viajero soy y seré.
Caminos hice y haré.
Mi vista en el horizonte.
No sé cuándo llegaré,
Pero si mi cruz ve usted,
Siga la ruta en mi nombre”
Gustavo Petro, desde que se sometió a la vida institucional, se dispuso a ser fiel a las normas que incluso él mismo aportó a lo largo de su participación como senador de la República. Utilizó a cabalidad las herramientas que esa constitución y el marco legal le ofrecían para hacer oposición en Colombia. Pertinente recordar que fue líder y activista guerrillero y junto a sus compañeros de lucha se sometieron a un proceso de paz propuesto por el gobierno del presidente Virgilio Barco.
Efectivamente el 9 de marzo de 1990 en Caloto, Cauca, se firmó el primer acuerdo de paz entre una guerrilla y el Estado colombiano. Mucho tiempo antes de ese acuerdo de paz, el M19, en ejercicio de su actividad de insurrectos propinó golpes de gran impacto en la sociedad colombiana, entre otros: Hurtaron la espada de Bolívar; secuestraron y asesinaron al líder sindical José Raquel Mercado; Hurtaron las armas del Catón Norte pertenecientes al ejército; Toma de la embajada de la República Dominicana; Secuestro de la tripulación del Avión Curtis C-46 de Aeropesca; Hundimiento de la embarcación El Karina; Secuestro de Martha Nieves Ochoa; Ataque a la Casa de Nariño; Batalla de Yarumales; Toma del Palacio de Justicia; Ataque al Batallón América; Secuestro de Álvaro Gómez Hurtado; Secuestro de Políticos Industriales y periodistas; 48 tomas guerrilleras a poblaciones; intervención de periódicos radio y televisión; Hurtaron camiones de leche que repartieron en sectores populares. Posterior a ello habrían declarado que la guerra no era la solución y resolvieron, deponer las armas en una negociación con el gobierno Barco.
Se puede inferir que la llegada a la presidencia de Petro, no es un sueño personal de él sino que es la ruta que siguió luego que grandes líderes tanto de su movimiento M19, alzados en armas: Jaime Bateman Cayón, Alfonso Jacquin, Álvaro Fayad Delgado, Carlos Toledo Plata, Carlos Pizarro León Gómez; como algunos sobresalientes en partidos tradicionales, caudillos liberales: Jorge Eliécer Gaitán, Luis Carlos Galán Sarmiento; el conservador: Álvaro Gómez Hurtado; y de la Unión Patriótica: Bernardo Jaramillo Ossa, Jaime Pardo Leal, (como olvidar la ruta de 4.616 asesinados y 1.117 desaparecidos de éste movimiento).
El finado exsenador Roberto Gerlein, afirmaba en una de sus magistrales oratorias en el congreso, cuando se debatía la viabilidad de conceder curules exprés a los guerrilleros de las FARC, dentro del proceso de paz del presidente y Nobel de Paz Juan Manuel Santos, que Petro todos los martes tenía la obsesión de pronunciar un discurso debate contra Álvaro Uribe, sindicándolo de paramilitar, debates que precisamente destaparon la barbarie de la Para política y de los falsos positivos o ejecuciones extrajudiciales, definida ésta como el acto de matar deliberadamente a una persona al margen de cualquier marco jurídico. Pero sin embargo más allá de esa ruta y legado que trazaron los grandes líderes que le antecedieron en su propósito de ser el mandatario de los colombianos, fue su regia convicción que es por el camino del debate democrático que este país sale avante.
Fiel a esa convicción democrática y su compromiso bajo el mencionado acuerdo de paz, es que posterior a su militancia guerrillera en La Alianza Democrática M19 o el M, desfila por los partidos políticos Movimiento Vía Alterna (1.997- 2005); Polo Democrático (2006-2010); Colombia Humana (2011 Hasta la fecha donde se afilió a la Lista de la Decencia desde 2017 desembocando en el Pacto Histórico en el 2021).
Impresiona observar por todos los medios de comunicación las movilizaciones de jóvenes, indígenas, afros, y otras minorías de diversos lugares del territorio nacional, que han apostado porque el presidente Petro, cumpla con toda su agenda de Gobierno, convencidos que su futuro social está enmarcado en los cuatro años institucionales de la presidencia de Petro. ¡Tremenda responsabilidad! Esperemos que al final su gestión no de lugar a la decepción.
Gustavo Petro luego de dos intentos fallidos para ser presidente de Colombia, (por el Polo Democrático 2010 y por la Colombia Humana 2018), finalmente logró el objetivo de la ruta que otros fijaron, logrando triunfar con el Pacto Histórico en 2022 para llegar a la casa de Nariño.
Ese Pacto Histórico fue creado el 11 de febrero de 2021 a un año aproximado a las elecciones presidenciales de primera vuelta y lo conformaron e integraron fundamentalmente siete partidos: Colombia Humana, Unión Patriótica-partido Comunista, Polo Democrático Alternativo, Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS) Partido del Trabajo de Colombia, Unidad Democrática y Todos Somos Colombia.
Petro aprendió durante su ruta a la presidencia, que solo no era posible coronar la primera Magistratura, por ello acordó con esos partidos una agenda común principalmente en temas sociales y las denominadas “Reformas Urgentes aplazadas por el establecimiento”, como son:
- Implementar en su totalidad los acuerdos de paz negociados en La Habana entre el Gobierno y las Farc.
- Reforma agraria.
- Reforma laboral y pensiónal.
- Reforma a la educación.
- Reforma de la Ley 100 para reformar el derecho a la salud.
- Reforma de la justicia.
- Reforma política.
- Impulsar un paquete legislativo ambiental para cumplir con las metas de lucha contra el cambio climático pactadas en París en 2015.
- Cuidar el agua y proscribir el fracking y la explotación de páramos y Parques Nacionales Naturales.
- Apostarle a la renta básica para las familias más pobres.
- Dinamizar la economía para los empresarios, al brindar renta básica para los más vulnerables.
Necesario e inaplazable, complementar está agenda a propósito de las últimas semanas intimidatorias y devastadoras contra la sociedad colombiana, de parte de todas las bandas criminales, donde se imponga un sometimiento total de las bacrim a la justicia.
A la fecha de su posesión como presidente, varias son las críticas recibidas por la adhesión de políticos señalados por corrupción, o que han militado en sendos partidos políticos desde al menos hace 20 años, acompañando los respectivos presidentes de turno entre los que sobresalen Armando Benedetti y Roy Barreras, quienes se ajustaron a los postulados del pacto y precisamente aportaron y apostaron sus rutas de componendas políticas para lograr unas mayorías en el Congreso de la República, lo que les permitió elegir presidentes del Pacto Histórico, en Senado y Cámara, algo inédito en la vida institucional del País. Finalmente, impresiona observar por todos los medios de comunicación las movilizaciones de jóvenes, indígenas, afros, y otras minorías de diversos lugares del territorio nacional, que han apostado porque el presidente Petro, cumpla con toda su agenda de Gobierno, convencidos que su futuro social está enmarcado en los cuatro años institucionales de la presidencia de Petro. ¡Tremenda responsabilidad! Esperemos que al final su gestión no de lugar a la decepción.
Apéndice 1: Los colombianos esperamos que la procuradora Margarita Cabello, rinda informe de la gestión que realizó el exprocurador Carrillo, cuando viajó a Madrid, España, para indagar sobre la corruptela de la empresa Triple A de Barranquilla. De la misma manera informarnos con claridad, que tipo de negociado se efectuó entre la Sociedad de Activos Especiales (SAE S.A.S), de la Fiscalía General de la Nación y la empresa de alumbrado público de Barranquilla, donde se oficializó la venta del 82.16% de las acciones pertenecientes al Grupo INASSA, que ha generado que la empresa pública Canal de Isabel ll, con la garantía del gobierno español, accionen demandas multimillonarias contra el Estado colombiano.
Excelente reseña.